La muerte de los sueños.

 

 

Buenas a todos y a todas, mis queridos seguidores del arte (y mis discípulos para conquistar este mundo de una forma muy artística y tal). Espero que estéis todos bien. Hoy es un día especial, porque esta es la primera publicación en una nueva plataforma: Blogger. Hacía tiempo que quería darle mandanga a esto del análisis fílmico y tal, así que hoy os traigo una de las películas que más mal rollo me han dado de todas las que he visto; y, creedme, he visto muchas pelis. En fin, no me enrollo más: Let'ssssss go!

La película es cuestión es Réquiem for a dream, dirigida por Darren Aronofsky. Esta producción está basada en un libro escrito en 1978 por Hubert Shelby con el mismo nombre. Resumiendo de qué va la peli: drogas y sueños frustrados. Se trata de una obra maestra indiscutible, con un tratamiento muy duro y real sobre las adicciones, sus consecuencias y la tristeza y todo eso mis panas. Lo más característico es el ritmo visual frenético y esos increíbles planos múltiples. Al final sientes que la peli no te da ni un respiro mientras te bombardea con sonidos mal rolleros, imágenes extrañas y mucha depresión everywhere. Empezando con el título: Réquiem 4 a Dream. ¿Qué es un réquiem? pues se trata de un canto para honrar a los difuntos. Total, si sumas 3 y 3, te darás cuenta que el verdadero título es La muerte de los sueños. Más explícito imposible.

 En la película hay 4 personajes principales: Harry y Marion, su novia; Tyrone el amigo de estos dos y, por último, Sara la madre de Harry. Todos tienen sueños que desean cumplir. Harry y Marion quieren abrir una tienda de ropa (Marion sueña con ser diseñadora). Sara sueña con salir por la tele en su programa favorito, ser famosa y querida por todos y bla bla bla. Tyrone sueña con estar con su madre a la que dejó para venirse a conocer el sueño americano. Vamos a empezar a darle caña a Sara Goldfarb, la madre de Harry/el Joker de Suicide Squad. Pues total, que la madre de Harry es adicta a la fama y la comida. Es decir, en la peli se nos muestran distintas adicciones; no solo las drogas son malas mis panas. Sara es una mujer anciana, de más de 50 que vive sola (es viuda) en su pisito, y su hijo drogadicto nunca va a verla nada más que para tocarle las narices. Sara es adicta a dos cosas: la televisión y la comida. Está casi todo el día viendo realities con Jorge Javier Vázquez y comer donuts a cascoporro. Sueña con que le llaman para participar en su programa favorito y así, por fin, podrá ser reconocida, querida y todo lo que la sociedad asocia con la fama y los medios. Para ello, deberá bajar de peso y a partir de ahí todo va ''no muy bien''. Aquí ya viene la primera denuncia social de la película, la cual es en sí una tremenda denuncia a la sociedad, al sueño americano y a la superficialidad y tal. Con Sara podemos ver la creencia de que si estás delgado, eres famoso y todas estas chorradas, la gente te quiere más, tú te quieres más, tu familia te quiere más y, en fin, eres mejor persona. Este es un gran engaño el cual llevará a Sara a...bueno, mejor ved la película. ¡Siguiente!

Marion y Harry son drogadictos pero de los que van a saco. Cda 20 segundos ¡pum! rayita de coca, pinchazo en antebrazo y hala, a flotar con Pennywise. A Marion le gusta la moda y para ello, Harry y Tyrone, su amigo negro (no lo digo en sentido negativo, solo era una aclaración), venden droga en la calle para seguir poniéndose las botas y ver sus sueños cumplidos. En el fondo, Marion y Harry, como cualquier pareja, sueñan con un futuro en el que puedan compartir juntos, tener prosperidad y sumar logros, prestando un servicio a la sociedad, lejos del mundo de las drogas.

 Todo esto sumado a la desgarradora música. Sí, no tiene otra palabra que la describa mejor: desgarradora. O sea, poneos un momento (ahora, antes de seguir leyendo) a mirar la escena en que Harry y Tyrone llegan a la ciudad esa donde pueden pillar droga y llevársela a su localidad original, los pilla la policía y los mete en el calabozo. Mirad esos minutos y poned atención al sonido. Os vais a cagar encima del mal rollo, creedme. Eso solo demuestra la increíble maestría en este apartado, que nos remueve por dentro de una forma cruda, triste, terrorífica, pero espectacular al fin y al cabo. La película es desagradable y muy cruda. Sin embargo, eso no quita que sea una obra maestra del cine, capaz de hacernos sentir estas cosas. 

 Por último, siguiendo con el tema de la denuncia, la propia peli nos invita a reflexionar sobre quiénes son los drogadictos o, en general, la gente con serias adicciones: solo quieren lo mismo que todos queremos: seguridad, estabilidad, amor, compañía y que los seres que aman y que ellos mismos sean felices. La película critica las tendencias de la sociedad actual que son asociadas al éxito; los realitiy shows, la popularidad y, sobre todo, las soluciones fáciles vendidas por el marketing. Hay una fuerte crítica a las nociones de popularidad asociadas al éxito que es más relevante hoy en día debido a la influencia de las redes sociales y de los reality shows. Sara tiene la creencia de la sociedad americana de que alcanzar la fama equivale a "ser alguien", a ser amada y a alcanzar el éxito. También la figura esbelta está ligada al mundo de la televisión, la fama y Hollywood.

Bueno, yo creo que con esto ya sabemos lo suficiente sobre Réquiem for a dream como para fardar de nuestro alto estatus de cinéfilo con nuestros amigos menos dotados fílmicamente. Hala, adiós.