República romana: las Guerras Macedónicas

 

 

Imagen extraída de: https://historiaeweb.com/2019/07/06/guerras-macedonicas/

 

Bueno. bueno, bueno... una semana más aquí, vuestro historiador de confinza. Vamos a darle duro de nuevo a este mundo tan maravilloso que es la Antigua Roma. Espero que os hayáis leído todos los posts anteriores, porque aquí va uno nuevo, cargadito de guerra y destrucción, como era usual en la Roma que todos (o casi todos) conocemos.

Esta ves, voy a hablarte de las guerras que, evidentemente, pone en el título. Roma vs Macedonia. Si la última vez hablamos de las reformas de los Gracos, ahora retrocedemos unos muchos años atrás, a los siglos III-II a.C. Obviamente, ya sabemos el final de la historia, como siempre ocurre con la Roma Invicta. Los macedonios (o macedónicos, realmente no sé como se diría) perdieron. Resulta que en el siglo III, Macedonia era la próxim gran rival de los romanos, después de que los cartagineses fueran borrados del mapa. El ejército descendía del propio de Alejandro Magno. Como todos sabemos, Alejandro dejó huella en muchísimos ámbitos, como en el militar. El ejército macedonio destacaba en la fuerza de su falange (soldados rasos, muy cerca unos de otros, formando filas y filas). La primera guerra tuvo lugar cuando Filipo V se alía con Cartago, durante la 2ª Guerra Púnica. En efecto, mis queridos aunque no tan intelectuales discípulos: Roma estaba tan tocha que podía pegarse a la vez con 2 potencias militares a la vez. Sin embargo, esta primera guerra, podríamos considerarla un poco un mojoncete de pato, ya que solo se habla de pequeñas escaramuzas (combates de poca importancia). Al final, los macedonios mandan a Cartagena a pastar y firman una paz inestable con Roma, pero paz al fin y al cabo. Como ya te puedes ir imaginando, Roma no es de dejar las cosas muy en paz. La segunda guerra macedónica tuvo lugar en el año 200 a.C. y aquí ya empezamos a entrar en materia de la guapa señores. Derrotada Cartago, Roma reina sobre todo el Mediterráneo. Filipo V sigue creciendo en Oriente, y empieza a liarse a puñetazos con los griegos, es decir, Rodas y Pérgamo, ya que eran las ciudades mediterráneas que tenía más cerca. Como pasa siempre, los griegos piden ayuda a Roma, el gran gigante que si le tocas las narices, te pisa y te orina encima luego. Roma pide la retirada de Filipo V de Grecia, el cual ya había empezado a expandirse y a invadir pueblos y tal. Filipo solo retira parte de las tropas, así que el Senado de Roma envía a un cónsul, Tito Quincio Flaminio, con 6.000 soldados y 300 jinetes para quitarse de encima al Filipo este. La primera en la frente. En la Batalla de Cinoscéfalos, Filipo pierde y firma otro tratado de paz. Sin embargo, el tío no sabe cuando rendirse, y su positivismo nubla su mente. Se alía (como ya hizo Aníbal con los galos) con tribus bárbaras enfadas con Roma, tribus del Danubio, y las lanza sobre Grecia y Roma. Sin embargo, Filipo V muere en el 179 a.C. Su hijo, Perseo, sigue queriendo romperle las bolas a romanos y griegos. Se alía con algunas ciudades estado griegas, que estaban en contra de Roma. Una táctica que a usaba Aníbal, supongo que recibieron su influencia. Por otra parte, Eumenes II, rey de Pérgamo empieza a quejarse de que Macedonia ha vuelto a romper la paz y todo eso, de forma continua, osea Eumenes se pone en plan pico pala, hasta que consigue que Roma se levante y vaya a rebentar a los macedonios. La tercera guerra macedónica se clausura en Pidna en el 168 a.C. Perseo consigue una victoria frente a la caballería ligera romana en el año 171 en la ciudad de Tesalia, y luego se vuelve a Macedonia, para llevar la guerra a su terreno. En el 169 a.C. el cónsul Lucio Emilio Paulo, hijo del que murió en Cannas, llegó a Pidna y destruyó, literal, al pobre Perseo, que no tenía mucha idea de batallas y tal, en la Batalla de Pidna, súper importante para entender el ridículo que hicieron los macedonios frente a los grandes soldados romanos. De hecho, el primero en huir de la batalla fue Perseo, el cual se largó con sus tesoros, hasta que fue apresado y llevado a Italia. Murió en Roma.

Resultado final: Macedonia se fragmenta en 4 repúblicas independientes, sin relción entre ellas. Roma vuelve a triunfar nuevamente, extendiendo sus dominios y dejando claro a los occidentales y a los orientales, que Roma siempre vence. Podrán perder batallas y morir millones de romanos, pero a la larga, Roma siempre gana. Increíble.