República romana: reformas militares de Cayo Mario
Buenas a todos y todas. Espero que estéis perfectamente, y con ánimos de aprender un poco más sobre la historia de la Antigua Roma. Hoy vamos a hablar de un cambio enorme en su historia militar, que supuso un factor clave para sus próximas victorias. Este factor clave es la reforma militar del cónsul y general Cayo Mario. Hechas las presentaciones, vamos allá.
Estas reformas militares se iniciaron en el año 107 a.C. de la mano de Cayo Mario, político y general romano. Esos cambios son los siguientes:
1- Inclusión de personas sin tierras ni propiedades al ejército romano. El estado les suministra armamento. Se les da un impleo fijo pagado. Reclutar hombres en periodos de crisis y amenazas. Se solucionó el problema económico provocado por la pérdida de la mayor parte de la clase media en las guerras.
2- Estandarizar el equipamiento de la legión romana. Tener a todas las tropas entrenando todo el rato. Empieza a haber una organización en el ejército: hastati, principes y triarii. Sustitución de la infantería ligera de los vélites por cuerpos especializados auxiliares.
3- Jubilación. Los soldados obtienen beneficios de jubilación en forma de tierras. Se les da una pensión y una finca en una zona conquistada. También se les otorga la ciudadanía romana al completar todo el servicio, es decir, al jubilarse vaya.
4- Los bagajes (equipamiento). Los soldados cargan con sus propias pertenencias, pero solo hasta 40 kg a la espalda.
Para terminar, quiero que antes de dormir, te vayas sabiendo más o menos la organización del ejército, ya que ambos sabemos que tienes una capacidad de retención limitada y, evidentemente, no cuentas con mi inteligencia extraordinaria. En fin, qué le vamos a hacer.
El ejército se dividía así a partir de las reformas de Mario: la unidad más básica del ejército era el contubernio. Un contubernio estaba formado por 8 soldados. La siguiente unidad es la centuria. En total, había 6 centurias, con 80 soldados por centuria. Después de la centuria, estaban las cohortes. De las 10 cohortes que podía haber en un ejército, cada cohorte estaba formada por 480 soldados, así que ya podéis ir haciendo cuentas. Cabe destacar que las cohortes estaban numeradas con números romanos (que gracioso soy con las palabras, soy la monda). Estos números iban desde la Legión I hasta la Legión X. Por fin llegamos a lo más gordo, las legiones, que son un cúmulo de todo. Cada legión estaba formada por 6.000 hombres.
Bueno ya está, que no es poco. Gracias a las reformas militares de Cayo Mario, los ejércitos romanos se convirtieron en perfectas máquinas de matar, formadas por soldados con excelente forma física y una disciplina insuperable. Agüita nene para lo que se nos viene encima. Hala hasta la próxima amigos. Sed buenos.



Comentarios
Publicar un comentario