Todo sobre El Escorial: parte I

 

 

Buenas a todos, espero que no hayáis pillado el Coronavirus y que vuestras familias estén de lo más bien. Hecha la pelota para quedar bien, vamos al grano que hoy hay caña de la buena. Te traigo, nada más y nada menos que TODA la información sobre el monasterio de San Lorenzo del Escorial, por si alguna vez has querido ir con tus amigos y hacerles una visita guiada cual profesional. Ahora tienes la oportunidad. Let's go!

Ficha técnica y construcción

El monasterio de San Lorenzo del Escorial se encuentra en la Sierra de Guadarrama, a unos 50 km de Madrid. Fue construido durante el reinado de Felipe III. El conjunto comprende el monasterio, biblioteca, palacio, panteón, basílica y colegio. La razón de su construcción: Homenaje por la victoria en la Batalla de San Quintín, contra los franceses, el 10 de agosto de 1557, justo el día de San Lorenzo. Por otra parte: deseos de Carlos (I en España y V en Alemania), de construir un panteón para la real dinastía de los Austria. Un dato interesante: escorial viene de las escorias (restos de fundición) que había allí, debido a las numerosas herrerías. Los encargados de construcción: La orden de los Jerónimos, una orden con mucho enchufe en la monarquía española. La construcción: 1563-1584. Empieza Juan Bautista de Toledo (arquitecto), muere en 1567 y le sigue Juan de Herrera, que crea un estilo propio: arquitectura herreriana. Empieza el 23 de abril (2 días antes que mi santo). El material más empleado: granito, porque el Escorial estaba rodeado de canteras de granito.

El monasterio

Rectángulo de 207 metros x 161. En cada ángulo, hay una torre de 55 metros de alto, con un chapitel puntiagudo de pizarra. Sobre las torres, bolas de metal, veletas y cruces encima. La planta de todo el conjunto tiene forma de parrilla, objeto del martirio de San Lorenzo, ya que fue erigido en su memoria. Las cubiertas son a 2 aguas con ventanas y chimeneas. En el centro del monasterio: la basílica. Alrededor se disponen las demás estancias. Frente a la iglesia está el Patio de las Reyes: gran espacio descubierto. Las fachadas N/O, son las más visibles, frente a una explanada que es la lonja. Las fachadas E/S: zonas ajardinadas.

Fachada occidental

Es la fachada principal, por donde se entra. 3 entradas (solo hay 1 visible) generando simetría. La puerta de la izquierda lleva al Colegio Alfonso XII. La puerta de la derecha: convento. La puerta central lleva al Patio de los Reyes y a la Basílica. La portada fue hecha por Juan Herrera. Está formada por una pequeña puerta adintelada flanqueada por 8 columnas de orden dórico (revivir el arte clásico), que soportan un entablamento clásico. Entre las columnas, huecos vacíos y ventanas, algunas de ellas, cegadas. Sobre el entablamento, 4 columnas jónicas sostienen un frontón triangular. Sobre la primera fila de columnas: 2 parrillas. En el piso superior, el escudo real Felipe II, realizado por Juan Bautista Monegro. Encima, una imagen de bulto redondo de San Lorenzo,o el patrón de todo el conjunto. También hecho por Monegro, mide 4 metros de alto y está hecho de granito y mármol blanco (el mármol siempre ha sido muy caro y difícil de manejar, y por tanto, de gran calidad y nivel social). Para rematar, adornos piramidales con bolas. El resto del espacio está ocupado por ventanas. En 1671: incendio destruye parte del monasterio. Reconstruido por Carlos II con aspecto barroco. Proyecto llevado a cabo por parte de fray Marcos de Herrera, quien finaliza la reconstrucción en 1676. Tras pasar la puerta central, hay un zaguán (como una especie de antesala) de 8 metros de ancho y 23 de largo, con una puerta a cada lado. Arriba hay una bóveda de piedra, apoyada en pilastras y arcos resaltados. De aquí vamos al Patio de los Reyes, la segunda parada en la visita.

Patio de los Reyes

Este patio recibe su nombre de las esculturas de los 6 reyes de Israel, ubicados en la fachada principal de la basílica, al fondo del patio. Mide 64 x 38 metros. Las esculturas son de Juan Bautista Monegro, entre 1580-1583. Miden 5 metros de alto, y se hallan sobre altos pedestales. Están hechos de piedra ''berroqueña'' (granito), llamada así por el Berrueco, un pueblo cercano a Madrid con canteras de granito. En las esculturas se aprecian los atributos reales, con coronas de bronce dorado de Sebastián Fernández y Gregorio Salazar. Representan los reyes que construyeron el templo de Jerusalén.