Yo, Claudio.



Buenas a todos, mis queridos gandiartistas. Después de 40 años y medio sin subir contenido, hoy, por fin, os traigo más historia de Roma. Sin mas dilación, vamos a ver cómo sigue todo el chanchullo este de los romanos.  


En fin, que nos quedamos la última vez con la muerte de Calígula y su familia, a manos de la guardia pretoriana. Resulta que había un señor de la familia imperial, concretamente, el tío de Calígula, que se llamaba Tiberio Claudio Druso Nerón Germánico, aka Claudio. Sobrino segundo de nuestro amigo Augusto (el primer jefaso) y sobrino primero de Tiberio, Claudio era un tipo muy particular. Fue hallado por la misma guardia asesina, escondido detrás de unas cortinas (o eso dice la historiografía común) y, automáticamente, fue proclamado emeprador por la propia guardia, subiendo al trono en el 41 d.C. Rápidamente entendemos porque los soldados querían a Claudio en el trono: era muy fácil de manejar, era tenido como el tonto del pueblo y, además, tenía diversas discapacidades y enfermedades: era cojo, tartamudo y epiléptico. Encima, este man tenía más de 50 años cuando subió al trono, único superviviente de la dinastía Nº 1 en la historia de la Roma imperial: la Julio-Claudia. ¿Por qué Julio-Claudia? fácil: porque los 5 emperadores que la forman (Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio y nos queda hablar de Nerón), estaban emparentados con Julio César y, además, estaban unidos, mediante matrimonio y adopciones varias, a las gens (conjunto de familias) Julia y Claudia. Por ejemplo, tenemos a César Augusto, que no tiene el Julio ni el Claudio en su nombre y apellidos, pero está emparentado con César. Por otro lado, tenemos a Calígula, que realmente se llamaba Cayo Julio César Augusto Germánico. Ya me entendéis. 

Sin embargo, no todo tiene que ser negativo para nuestro pobre amigo. Resulta que Claudio no era tonto. Tenía ojo para la administración, volviendo un poco a tiempos de Augusto y tratando de acercarse al Senado para colaborar juntos. Además, se le tenía por un tipo majo y de buen trato. Rescató algunos de los cultos religiosos abandonados, volviendo, más aún, al politeísmo tan característico de esta civilización. También extendió la ciudadanía a la gente de las provincias y, en resumen, a gente de fuera de la ciudad.No debemos olvidar que fue a saco con los britanos, entre el 43 - 47, tratando de conquistar aquellas islas sumidas en la bruma y las constantes lluvias torrenciales, así como ña conquista de Mauritania, Licia, Panfilia, Judea y Tracia. Pero...!ay¡ pobre Claudio. Las mujeres lo manejaron demasiado en su vida, y esto lo llevaría a la tumba. Se dice que llegó a casarse 5 veces. Las más peligrosas fueron la número 4 y 5, Mesalina y Agripina. Por su parte, Mesalina era lo que, vulgarmente, se conoce como ''una coneja''. Imagino que ya veis por dónde van los tiros. Efectivamente amigos, y esto era una humillación enorme, puesto que era la esposa del emperador, o sea, era la mismísima empeeratriz. Sin embargo, el pobre Claudio le echó huevos y la ejecutó en el 48. ¡Hala, a la otra te metes con Claudio!

Después de Mesalina, vino Agripina la menor, hija de Agripina la mayor, sobrina del propio Claudio, esposa del propio Claudio (nooo Claudio, dónde te sentaste...) y madre de Nerón. Esta fue la que llevó a la tumba al emperador. F por Claudio. Resulta que Agripina tenía un hijo de otro matrimonio (algo frecuente con esta peña) y, como buena madre, quería que su hijo triunfara en la vida. Por eso, convenció a Claudio para que nombrara sucesor a Nerón en lugar de Británico, supuesto hijo de C. con Mesalina. Hecho esto, la z***a de Agripina envenenó a Claudio y nada más. Fin de la vida de Claudio. Así, a grandes rasgos, este vendría a ser el reinado del pernúltimo de los 5 emperadores julio-claudianos.


 En unos días, señoras y señores, se viene el final de la primera dinastía imperial de Roma: ¡Abrid paso, que llega el pirómano estrella!






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