Final de la dinastía de los Severos.

Buenas a todos, mis queridos gandiartistas. Después de 40 años y medio sin subir contenido, hoy, por fin, os traigo más historia de Roma. Sin mas dilación, vamos a ver cómo sigue todo el chanchullo este de los romanos!!!

Resulta que, tras el asesinato frecuente y habitual, del anterior emperador, otra promesa llega para gobernar y regir el destino de cada una de las personas que formaron nuestra civilización favorita. En este caso, tenemos al señor Marco Aurelio Alejandro Severo, el cual reinó entre los años 222-235 d.C. finalizando, con Álex, la dinastía Severa. Adoptado por su primo, Heliogábalo, subió al trono y bla bla bla mirad la última publicación.  Sin embargo, y para terminar una dinastía, hay que destacar que Alejandro Severo gobernó con atino, lo que es de agradecer. Chico prudente y disciplinado, mejoró la organización del estado, haciéndolo más eficiente. Su abuela y su madre, Julia Mamea y Julia Maesa, estaban ahí encima de él controlando y aconsejando, lo que no era muy bien visto entre los soldados. Sin embargo, y por muy prudente y sensato que fuera, su reinado no estuvo exento de intrigas, conjuras y conspiraciones para quitárselo de encima, sobre todo, aquellas conspiraciones por parte de los pretorianos para eliminar altos cargos y sustituir. Como podéis ir viendo, con el paso del tiempo, los soldados van tomando cada vez más importancia desde los tiempos de la república. 

Al mismo tiempo, también respetaba los distintos cultos y comunidades religiosas, como la judía y cristiana, siendo capaz de reinado los primeros 9 años sin casi problemas de ningún tipo, lo dice mucho de su gobierno en aquellos tiempos. Positivo para Alejandro. Sin embargo, a partir del 232, se inició una guerra contra el rey sasánida Ardashir I, padre de la dinastía sasánida. El resultado fue favorable para Roma, como no podía ser de otra forma. Roma siempre gana. Siempre. Bueno, casi. Y nuevamente, los germanos y las tribus europeas en el norte no dejaban de dar por el saco, por lo que Severo tuvo que irse al norte a guerrear. Durante los preparativos para la campaña en el norte, los soldados, que no pueden ser más toca huveos, proclamaron así por la cara, un nuevo emperador, llamado Maximiano, un oficial de importancia que se había desempeñado bien en Germania. Esto enlaza directamente con el final de la vida del último Severo y su madre, asesinados en un campamento militar en Germania. Probablemente, este haya sido el emperador cuya muerte era injusta. Por su forma de gobernar, debería haber muerto de viejo o de enfermedad natural. En fin, te queremos Alejandro.

Hala, fin.