Inicios de la Alta Edad Media
Carlos Martel
Tras la unificación de los francos por Clodoveo I y su posterior muerte, era hora de que Francia pasara al siguiente nivel: el primer imperio medieval. Los sucesores de Clodoveo no tenían el mismo interés en goebrnar, por lo que, frecuentemente, dejaban los asuntos de gobierno en manos de los mayordomos de palacio, tanto económicos, políticos como militares. Era habitual que el mayordomo de un rey franco, marchara a la guerra en representación del mismo. El más destacado de estos sirvientes, fue un hombre llamado Carlos Martel (vencedor y líder en la batalla de Poitiers contra los musulmanes). Se sabe que Martel llegó al poder franco y fue sucedido por su hijo, Pipino el Breve, pero no se habla tanto de cómo un mayordomo llegó a ser rey. Estas son las razones de su ascenso: en primer lugar, Carlos nació en una familia de nobles francos. Su padre era Pipino de Heristal, otro mayordomo de palacio, lo que no era significado de ser sirviente o un esclavo. El cargo de mayordomo real, era el mismo que el que tiene actualmente un secretario de estado, personas de gran importancia para el país. Ser mayordomo de palacio significaba recibir la carga que suponía administrar un reino. Durante su vida como mayordomo, Carlos tuvo que hacer frente a diversas conspiraciones y luchas internas entre facciones nobles, que buscaban influir en el gobierno del rey franco. Estos conflictos le permitieron ganar poder y reconocimiento. El evento más importante en la vida de Martel, fue su victoria en Poitiers, lo que detuvo la expansión musulmana en Europa occidental. Tras la batalla, Carlos Martel siguió consolidando su poder y desempeñando un papel dominante en el reino franco. Aunque era el verdadero gobernante, Martel nunca asumió el título de rey, ya que la dinastía monárquica era la fundada por Clodoveo, los merovingios. De hecho, el rey que gobernaba de forma nominal mientras Martel manda de forma real, era el merovingio Teodorico IV, que murió en el año 737. Al morir Carlos Martel, su título de mayordomo de palacio, fue asumido por su hijo Pipino el Breve.
Pipino el Breve
Al igual que su padre, Pipino se dedicó a gobernar de forma efectiva el reino de los francos, mientras el título lo ostentaba Childerico III, el último rey de la dinastía merovingia. Su reinado llegó a su fin tras el golpe de estado de Pipino, que asumió la titularidad de rey franco, iniciando la llamada dinastía carolingia. Pipino tenía otro hermano, Carlomán. Cuando murió Carlos Martel, Pipino recibió el gobierno del palacio de Neustria y su hermano, el de Austria. Sin embargo, en el 747 Carlomán eligió la vida monástica y le cedió a Pipino su parte del territorio. Con el tiempo, Pipino fue ganándose el apoyo del clero, hasta que pudo deponer a Childerico por su incapacidad para gobernar. Esta coronación (por parte del Papa Esteban II) supuso el inicio de la alianza entre el Papado y la corona. Pipino fue considerado el primer rey ''por la voluntad de Dios''. El reinado de Pipino estuvo marcado por las campañas militares para expandir su territorio. Primero conquistó el ducado de Aquitania. Estableció un sistema de condes, con el objetivo de gobernar con mayor efectividad las diferentes regiones del reino y asegurarse de que se cumplieran las leyes reales. También promovió la utilización de la moneda como sistema de comercio y llevó a cabo reformas en la administración fiscal. Por otra parte, Pipino luchó contra los sajones en el norte y expandió el reino hacia el este, tomando el antiguo territorio de los lombardos. Luchó contra los ávaros en el 791 y liberó a Baviera de su control. Estableció un tratado de paz con el rey lombardo Desiderio en el 756, asegurando la paz en el norte de Italia y, de esta manera, garantizando el apoyo de la Iglesia en su gobierno. Finalmente, Pipino moriría en el año 768, dejando el reino en manos de sus dos hijos, Carlomán y Carlos. Ambos hermanos reinaron hasta que, en el 771, murió Carlomán, dejando como único rey a Carlos, que se convirtió más tarde en Carlomagno. Así empezaría la formación del Sacro Imperio Romano Germánico.
FIN
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