El gran momento del Imperio: Trajano

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Marco Ulpio Trajano fue emperador desde el año 98 d.C. hasta su muerte en el 117. Nació en Andalucía y fue el primer emperador nacido en Hispania. Fue el primer emperador de la dinastia Antonina. Es recordado como un gobernante exitoso y un brillante general. Presidió la mayor expansión territorial del Imperio de Roma. Trajano nació en la ciudad de Itálica (cerca de la actual Sevilla) y pasó de ser un reconocido militar durante el reinado de Domiciano a servir como legado de las legiones estacionadas en la Hispania Tarraconensis. En el año 89 apoyó a Domiciano en la revuelta de Lucio Antonio Saturnino, la cual había estallado en el río Rin. Años más tarde, sería adoptado como heredero por el anciano Nerva.

Ascenso al trono

Trajano no se encontraba en Roma en el momento del asesinato a Nerva. Estaba en la ciudad de Colonia (Alemania) cuando su sobrino Adriano, también futuro emperador, le comunicó la noticia. Trajano fue el primer emperador no italiano, lo que demuestra que la península itálica empezaba a perder su papel central en cuanto a política romana. Una vez recibida la noticia, en lugar de marchar rápidamente, Trajano siguió un tiempo en Germania terminando de castigar a los rebeldes. Una de sus primeras acciones como emperador fue mejorar la red de calzadas entre Mogontiacum (Maguncia) y Augusta Vindelicorum (Augsburgo). Además empezó a construir un limes para asegurar las tierras germanas a la derecha del Rin, la cuales habían sido ganadas durante la época de Domiciano. Cuando se sintió satisfecho con la seguridad de la región, Trajano volvió a Roma donde tuvo una entrada triunfal por haber asegurado las fronteras con la Germania bárbara.

El nuevo emperador fue acogido con entusiasmo por los romanos, aunque Trajano se ganó prontamente las aclamaciones al gobernar justamente y sin derramamientos de sangre. Liberó a muchas personas que habían sido encarceladas injustamente por Domiciano y devolvió buena parte de la propiedad privada que Domiciano había confiscado. Para cuidarse de aquellos gobernadores y administradores corruptos, Trajano conservó un control meticuloso, ocupándose de las diversas provincias y guardando para sí los permisos de construcción de edificios públicos. Esto le permitió desenmascarar y castigar a muchos senadores por malversación, los cuales se habían aprovechado enormemente durante el gobierno de Nerva. Por otra parte, Trajano creó un cuerpo de investigación formado por los mejores juristas de la época. De esta manera, se investigó a mucha gente sospechosa de mal gobierno en las provincias. Trajano estaba casado con Pompeya Plotina pero no tenían hijos. Historiadores como Dion Casio afirman que bebía mucho vino y sentía atracción por los jóvenes varones, como era el caso del hijo del rey de Edesa (ciudad de Mesopotamia). Sin embargo, nunca dejó que sus vicios le afectaran en el desempeño de su cargo. Trajano es considerado uno de los emperadores más serios y correctos, además de uno de los mejores administradores de los bienes públicos. El poder no lo corrompió, ni usó jamás su poder para eludir la ley. Supo hacerse querer por todos, especialmente por las clases dominantes: Senado y ejército. Era un convencido de que la disciplina y el progreso llevarían a una buena administración e importantes reformas. 

FIN