Monarquía de Roma: Organización social (parte II)
Alcestis y Admeto, artista desconocido (50-79 d.C.), Museo Arqueológico Nacional de Nápoles. Puedes encontrar más información en la web Arte Viajero.
Seguimos con todo el lío este de las agrupaciones de tribus, jefes mega importantes y demás. Conforme las décadas van sucediéndose y la población creciendo, se van acentuando cada vez más las diferencias entre ricos y pobres, entre privilegiados y no privilegiados. De esta manera, se va formando poco a poco la famosa pirámide social. Los historiadores han decidido, por unanimidad, que sea la pirámide la forma con que (de forma simbólica y más visual) se hayan agrupado las distintas clases sociales, no solo de las distintas civilizaciones de la Antigüedad (Grecia, Roma, Egipto) sino de toda agrupación humana hasta su fin definitivo durante la Revolución Francesa (aproximadamente), ya que esta supuso el paso de la Edad Moderna a la Edad Contemporánea y puso fin a la clásica división social de privilegiados y no privilegiados.
En este caso, encontramos más de un estrato en la pirámide social de la monarquía romana. En el post anterior hablamos de la evolución social partiendo desde el principio, desde tiempos de Rómulo, el primer rey de Roma. Ahora hemos llegado hast el sexto rey, Servio Tulio, el artífice de esta nueva organización según privilegios y renta económica. De hecho, esta nueva estratificación social se mantendrá (con pocos cambios) hasta el final del Imperio, que fue la última etapa. Por tanto, a lo que Servio Tulio (cuyo reinado puedes leer en esta entrada) puso nombre duró unos 1.054 años, prácticamente toda la historia de Roma, por eso, cuando en Internet, en libros o en el colegio estudiamos la organización social de la antigua Roma, estudiamos esta pirámide.
Total, que la sociedad romana estaba dividida en 5 grandes grupos: de arriba abajo tenemos los patricios, los plebeyos, los clientes, los libertos y los esclavos (fig. 1).
Los patricios eran hombres libres con derechos civiles y políticos completos. Descendientes de los mismos fundadores de Roma (o al menos es lo que ellos decían y utilizaron en muchas ocasiones como justificación para sus acciones impunes y fuera de todo juicio fiscal). Se trataba del grupo social más rico gracias a la posesión de grandes latifundios.
Los plebeyos gozaban solo de algunos derechos civiles y políticos, no completos, no al menos hasta después de la creación de la República; y a efectos prácticos, casi nunca estuvieron al mismo nivel ni tuvieron los mismos privilegios que los patricios. La desigualdad existió durante toda la historia de Roma. Dentro de los plebeyos encontramos también aquellos patricios de pueblos vencidos (se les degradaba a plebeyos), extranjeros que venían a Roma o hijos bastardos de otros patricios. Sin embargo, este estrato social lo componían, mayoritariamente, campesinos, artesanos y comerciantes.
En tercer lugar, estaban los clientes. Estos eran plebeyos que dependían jurídicamente (por ley) de un patrón, normalmente un patricio. Dependían de un rico por motivos de pobreza o inseguridad, estableciéndose una especie de relación de esclavitud con el patricio. Eran como el falso 9 del fútbol (desempeñaban las funciones de un esclavo, aunque no dejaban de ser plebeyos, pero eran mejor tratados que los esclavos).
Los libertos gozaban de derechos limitados. Este grupo lo formaban antiguos esclavos ''libertados'' y podían desempeñar cualquier tipo de actividades. Es decir, cuando a un esclavo se le liberaba, decimos que era manumitido, pasando a ser un plebeyo con derechos y libertades limitados, pero al menos ya no era propiedad de nadie.
Por último, los esclavos ni siquiera eran considerados personas. De hecho, los romanos consideraban al esclavo como una propiedad, un bien mueble; eran tratados peor que un gato o un perro. Este grupo lo formaban delincuentes y criminales, así como soldados o plebeyos hechos prisioneros de guerra. Desempeñaban todo tipo de actividades, desde ser objetos sexuales de sus amos hasta llevar a los hijos a las escuelas o casas de los pedagogos. Si un esclavo tenía hijos, estos eran esclavos hasta que murieran o fueran manumitidos. Puedes aprender más en la web de Un Profesor.
Webgrafía
- Sobre las páginas web que he utilizado ya he ido dejando sus respectivos enlaces en los pies de foto o durante la narración de los hechos; me da una pereza tremenda ir de uno en uno citando cada web en esta sección, por lo que las fuentes las tenéis, aunque no estén citadas como Dios manda, cosa que me la viene a sudar un poco. Hala, hasta luego.
Bibliografía
- Martínez-Pinna, J. (1999). Los orígenes de Roma. Editorial Síntesis.
FIN




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