Fuentes para el estudio de la Monarquía Romana
La Lapis Niger, una fuente antiquísima de enorme valor histórico. Imagen extraída de la web La túnica de Neso. Puedes obtener más información a través de este enlace.
Introducción
En el estudio de la antigua Roma, se suele empezar por el principio: la monarquía. Esta fue la primera etapa en la historia de esta civilización, y también es el periodo sobre el que menos información se tiene. No fue hasta siglos posteriores, cuando historiadores como Tito Livio o Dionisio de Halicarnaso empezaron a ''construir'' la historia de Roma desde sus inicios. A grandes rasgos, todo lo que se conserva, que ha servido para que aprendamos cosas sobre la monarquía, es posterior: fuentes literarias, tradición oral, mitología, arqueología y epigrafía.
1. Fuentes históricas: historiadores como Tito Livio y Dionisio de Halicarnaso son considerados las fuentes más importantes a la hora de construir un relato más o menos preciso y fiable sobre la monarquía romana.
1.1 Tito Livio: fue un historiador romano nacido en Patavium (ciudad italiana de la región del Véneto). Nació en el 59 a.C. y murió en Padua en 17 d.C. Puedes observar un retrato de este autor más abajo, en la figura 1. Tito Livio es autor de Ab Urbe Condita (fig. 2). Se trata de una enorme obra escrita en 142 libros (desde el I al CXLII), aunque solo han sobrevivido unos pocos libros. La obra completa abarcaría desde la fundación de Roma (según el mito, que te dejo en esta entrada) por Rómulo y Remo hasta el año 9 a.C. durante el reinado del emperador Augusto. La intención de Tito Livio era ofrecer una obra narrativa detallada y moralizante sobre la historia de Roma, haciendo énfasis en las virtudes y vicios de los romanos a lo largo de los siglos. Indudablemente Ab Urbe Condita es una obra fundamental y de incalculable valor para la historia de la humanidad.
1.2 Dionisio de Halicarnaso: fue un historiador y profesor de retórica griego que vivió en Roma durante el reinado de Augusto (fig. 3). Nació en Halicarnaso (actual Bodrum, Turquía) entre el 60-55 a.C. y murió en el 7 a.C. Su obra más importante es Antigüedades romanas. Se trata de una extensa narración en la que Dionisio examina los orígenes de Roma hasta el establecimiento de la República. El historiador griego analiza y critica las fuentes anteriores, incluidos los mitos y tradiciones orales sobre la fundación de Roma, además de ofrecer una visión detallada sobre la monarquía, sus instituciones políticas y sociales. Dionisio fue contemporáneo de Tito Livio.
1.3 Plutarco: conocido como Plutarco de Queronea (fig. 4), fue un historiador, biógrafo y filósofo griego. Nació en Queronea (municipio en la región de Beocia) en el año 46-50 d.C. y murió en Delfos alrededor del 120. Realizó varios viajes por el Mediterráneo, incluyendo Roma y Egipto. Es conocido, entre otras cosas, por su obra Vidas paralelas, una serie de biografías de famosos griegos y romanos elaboradas en forma de parejas, comparando y destacando las virtudes y defectos de ambos. La utilidad de esta fuente es que ofrece detalles sobre reyes romanos como Rómulo o Numa Pompilio.
1.4 Marco Terencio Varrón: sabio romano que nació en Rieti en el 116 a.C. y murió en el 27 (fig. 5). Una de sus principales obras que sirven para el estudio de la monarquía romana, es Antigüedades de las cosas humanas y divinas, obra que se perdió; por suerte, al ser citada varias veces por San Agustín en La ciudad de Dios, se han podido reconstruir algunas partes. La obra se divide en 41 libros, de los cuales los 25 primeros son las ''cosas humanas'' o res humanae, mientras que los 16 restantes son las res divinae. Básicamente es un relato de la historia cultural e institucional de Roma y la religión romana, escrito en torno al año 50 a.C.
1.5 Otras fuentes históricas: sin contener tantos datos como los ofrecidos por estos historiadores, encontramos información importante sobre la monarquía romana en fuentes fragmentadas, como pedazos de texto y citas de autores que vivieron en épocas posteriores y escribieron sobre periodos posteriores, tales como Polibio (su obra más importante es Historias), Diodoro Sículo (Biblioteca histórica) y otros de menor relevancia.
2. Fuentes literarias: también podemos encontrar información muy valiosa en otro tipo de escritos, como son los poemas y otras obras textuales, en las que se hacen referencias a la historia temprana de Roma. De esta manera, podemos recurrir a grandes escritos como la famosa Eneida, escrita por el poeta Virgilio (fig. 6), la cual incluye episodios que conectan la fundación de Roma con la mítica ciudad de Troya.
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3. Tradición oral y mitología: la tradición oral es la forma más básica de registro del conocimiento. Por eso ha desempeñado un papel crucial en la transimision y la construcción del relato histórico sobre la antigua Roma. De esta manera, principalmente se transmitían los mitos fundacionales, es decir, aquellos que se originan en torno a la creación u origen de una cosa. El mito fundacional más conocido y difundido es el de Rómulo y Remo, los hermanos que fundaron Roma e iniciaron su historia. El mito sobre la fundación de Roma es demasiado largo para explicarlo aquí (así que pon atención a las próximas entradas para aprender todo cuanto se pueda sobre esta civilización). La tradición oral también consistía en la descripción e historias de cada uno de los 7 reyes romanos, desde Rómulo hasta Tarquinio el Soberbio. Todas estas historias no solo proporcionaban un relato de los acontecimientos pasados, sino que también servían para ir forjando la identidad romana y transmitir valores éticos y cívicos. A medida que Roma progresaba, toda la tradición oral quedó plasmada en papel gracias a la acción de los historiadores, que recogieron y mezclaron hechos más o menos reales y verídicos con habladurías y hechos fantásticos fruto de la subjetividad y opiniones de los emisores.
4. Arqueología: estos son campos fundamentales para el estudio de la monarquía romana, proporcionando información que muchas veces no aparece en las fuentes literarias.
4.1 La Regia y el Comitium: en el Foro romano se han llevado a cabo excavaciones que puedan arrojar más luz sobre la oscura monarquía, destacando las excavaciones efectuadas en edificios y lugares como la Regia (figs. 7 y 8) y el Comitium (fig. 9). La Regia es una antigua estructura en el Foro Romano que se asocia con los primeros reyes de Roma, sobre todo con el gobierno de Numa Pompilio. Las excavaciones han revelado que este edificio era utilizado con función administrativa y religiosa, además ser el principal cuartel general de estos reyes, construido por Numa. Por su parte, el Comitium era una antigua área de reunión pública, objeto de excavaciones que han revelado restos de pavimentos y estructuras de época monárquica, así como centro de reuniones para tomar decisiones.
4.2 Excavaciones en los montes: las excavaciones desarrolladas en el Monte Palatino revelaron restos de cabañas primitivas que se han asociado tradicionalmente con la residencia de Rómulo, el mítico fundador de Roma, y sus primeros hombres, así como restos de murallas datados en esta primera etapa, lo que indica unos esfuerzos ya tempranos por defender la ciudad (figs. 10 y 11). También puedes leer más cositas interesantes en una de las últimas entradas del blog, que hablan, precisamente, de los primeros pobladores de Italia y los restos que dejaron.
5. Epigrafía: a parte de las excavaciones arqueológicas, podemos recurrir a las obras epigráficas que se han elaborado y hacen referencia a la Roma monárquica. En este campo destacamos hallazgos como la Lapis Niger y la Fibula Praenestina.
5.1 Lapis Niger: La lapis niger (piedra negra en latín) es un antiguo santuario situado bajo el Foro. Según las excavaciones, este santuario alberga la primera inscripción latina conocida. Esta inscripción está fechada entre los años 570-550 a.C., correspondiéndose con la primera etapa de la historia de Roma. El lapis niger formaba parte del antiquísimo y ya mencionado Comitium, el espacio de reunión público de los comicios curiados, situado en la esquina noroeste del actual Foro. Hay que destacar la labor del arqueólogo veneciano Giacomo Boni, el descubridor del santuario en el año 1898. Puedes ver una imagen de esta piedra arriba del todo, que nos lleva a la web indicada, o abajo, que nos lleva a una web diferente (fig. 12).
5.2 Fibula Praenestina: por su parte, la llamada fíbula prenestina (figs. 13 y 14) es, en primer lugar, una fíbula. Se trataba de un broche o hebilla para sujetar prendas de vestir. Nuevamente, según la web La Brújula Verde, este objeto es fuente de controversias. Descubierto en 1871 por el arqueólogo alemán Wolfgang Helbig, esta pequeña pieza de oro de apenas 10 centímetros y medio de longitud contendría la inscripción latina más antigua descubierta. Supuestamente dataría del siglo VII.
6. Obras de arte e ingeniería: existen otros tipos de fuentes documentales, tales como las obras de arte y los proyectos urbanísticos. En el campo de la ingeniería, hay que mencionar el caso de la gran Cloaca Máxima, mientras que en el campo del arte encontramos los primeros templos dedicados a los principales dioses romanos.
6.1 Cloaca Máxima: el primer sistema de alcantarillados de Roma, construida durante el reinado de Lucio Tarquinio Prisco (siglo VI a.C.). Su construcción refleja los avances en ingeniería y la necesidad de gestionar el agua en una ciudad en crecimiento, sobre todo porque el terreno en que se asentó Roma era, en muchos lugares, inestable y pantanoso, muy propenso a las inundaciones (figs. 15 y 16).
6.2 Templos romanos: también son importantes los primeros templos construidos en la ciudad, tales como el templo de Vesta o el templo de Júpiter Óptimo Máximo. El templo de Vesta (figs. 17, 18 y 19) fue construido durante el reinado del segundo rey, Numa Pompilio, en honor a la hija de Saturno, Vesta, diosa encargada de mantener la paz en el cielo divino y protectora de las amas de casa. El aspecto actual no es el que tuvo en su tiempo, ya que se ha reconstruido varias veces debido a los varios incendios que ha sufrido (en Roma los incendios eran tremendamente frecuentes). El aspecto actual se debe a la restauración efectuada por la emperatriz Julia Domna, hacia finales del siglo II d.C.
Un templo, aún más importante que el de Vesta, fue el templo de Júpiter Feretrio (figs. 20 y 21), posteriormente conocido como templo de Júpiter Óptimo Máximo. Este fue el primer templo que se construyó en Roma y, aunque de localización incierta, se supone que estaría situado en la colina Capitolina. Fue dedicado al dios Júpiter por Rómulo después de vencer a un rey vecino, pocos años después de la fundación de Roma.
Otros templos de enorme valor arqueológico e histórico son aquellos que ofrecen información sobre los ritos y cultos religiosos. En este sentido, además del templo de Vesta, hogar de las vírgenes vestales y hogar del fuego sagrado de Roma, hay que mencionar el área sagrada de San Homobono (fig. 22).
7. Obras defensivas: en este sentido, podemos mencionar la construcción de las murallas servianas (fig. 23), de la época del rey Servio Tulio. Pertenecen al periodo de la monarquía romana y muestran a una Roma en una fase de expansión territorial.
Conclusión: como puedes leer, en realidad es poco lo que se conserva sobre el primer periodo de la historia de la antigua Roma, al menos en comparación con lo que supusieron los 482 años de República y los 503 del Imperio. La monarquía fue un periodo oscuro y difuso en cuanto a información, aunque sumamente interesante desde el punto de vista histórico y cultural. La temprana Roma está envuelta en la mitología, la leyenda y la falta de información fiable, por lo que, a menudo, se rellenan los ''huecos'' con leyendas y mitos. Sin embargo, es fundamental conocer cómo se desarrolló la monarquía de Roma porque supuso el nacimiento de lo que, siglos más tarde, daría forma al poderoso gigante conquistador del mundo antiguo que fue Roma, la Aeterna Urbs.
Referencias de interés
- Ref. 1: Puedes acceder a los libros de Tito Livio a través de este enlace
- Ref. 2: Puedes acceder a Vidas paralelas de Plutarco a través de este enlace
- Ref. 3: Puedes obtener más información sobre la Cloaca Máxima a través de este enlace
- Ref. 4: Puedes obtener más información sobre las murallas servianas a través de este enlace
- Ref. 5: Puedes obtener más información sobre el área sagrada de San Homobono a través de este enlace
Bibliografía
- Baker, S. (2009). Roma. Auge y caída de un imperio. Crítica. (Obra original publicada en 2006).
- Beard, M. (2016). SPQR: Una historia de la Antigua Roma (S. Furió, Trad.). Crítica.
- Cornell, T. J. (1999). Los orígenes de Roma. Crítica. (Obra original publicada en 1995).
- Livio, T. (1969). La monarquía romana. Aguilar.
- Martínez-Pinna, J. (2001). Los Reyes de Roma: entre la leyenda y la historia. Gerion, (19), 689–707.
- Mommsen, T. (2013). Historia de Roma (Vol. I). Liete. (Obra original publicada en 1856).
- Sobre las páginas web que he utilizado ya he ido dejando sus respectivos enlaces en los pies de foto o durante la narración de los hechos; me da una pereza tremenda ir de uno en uno citando cada web en esta sección, por lo que las fuentes las tenéis, aunque no estén citadas como Dios manda, cosa que me la viene a sudar un poco. Hala, hasta luego.
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